En la lista señalada por la Unesco aparecen manifestaciones diversas como los conocimientos de los chamanes jaguares de Yuruparí y las Fiestas de San Pacho.
Manifestaciones señaladas por la Unesco dentro de la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, Colombia guarda todo un tesoro cultural que ningún extranjero se debería perder. Marca Colombia te presenta una breve reseña de cada una de ellas.
Carnaval de Barranquilla (Barranquilla, Atlántico)
Esta colorida fiesta paraliza cada año al Caribe colombiano en un caluroso encuentro liderado por personajes festivos como el Rey Momo, Joselito Carnaval, la muerte y las marimondas. El Carnaval fue reconocido como patrimonio por la Unesco en 2003.
Carnaval de Negros y Blancos (San Juan de Pasto, Nariño)
Nombrado en la lista patrimonial desde 2009, este carnaval es la fiesta más importante del Pacífico sur colombiano al celebrar con harina, música y comparsas la diversidad étnica del país.
Espacio Cultural de Palenque de San Basilio (Bolívar)
Palenque es uno de los grandes tesoros patrimoniales con los que cuenta Colombia por su grandiosa historia de libertad y tradiciones que aún guardan el legado africano. En reconocimiento a sus rasgos sociales y lingüísticos la Unesco incluyó a la población en la lista de manifestaciones patrimonio en el año 2005.
Fiestas de San Pacho (Quibdó, Chocó)
Con una tradición de 365 años, las Fiestas de San Francisco de Asís o San Pacho como se les conoce popularmente son el encuentro cultural más importante del departamento del Chocó. La fiestas, reconocidas en la lista patrimonial por la Unesco desde 2012, celebran la herencia africana.
Los conocimientos tradicionales de los chamanes jaguares de Yuruparí (Vaupés)
Reconocidos por la Unesco en 2011 como patrimonio de la humanidad, los conocimientos de los chamanes jaguares de Yuruparí incluyen una serie de rituales mágicos de sanación enmarcados en el conocimiento, la sabiduría y el cuidado del medio ambiente.
Músicas de marimba y cantos tradicionales del Pacífico Sur de Colombia (Valle del Cauca, Cauca y Nariño)
Estas manifestaciones, señaladas como patrimonio por la Unesco en 2010, son el testimonio de la cultura del Pacífico sur colombianoque revive mediante la música y los cantos rituales todo el legado ancestral de las comunidades afrodescendientes que habitan esta parte del país.
Procesiones de Semana Santa en Popayán (Cauca)
Esta celebración religiosa —una de las más antiguas de Sudamérica— es conocida en el mundo por sus multitudinarias y enigmáticas romerías realizadas desde el siglo XVI. El valor de estas fiestas fue reconocido por la Unesco como bien patrimonial en el año 2009.Sistema Normativo de los wayuus, aplicado por el pütchipü’üi (Guajira)
Este sistema normativo basado en la compensación es dirigido por el Pütchipü ‘ üi (palabrero) que guía a la comunidad wayuu en sus conflictos. Los sistemas rituales, los símbolos de armisticio y los elementos ancestrales hicieron que esta manifestación ingresara a la lista patrimonial de la Unesco en 2010.
Conoce más sobre nuestra cultura y descubre por qué en patrimonio la respuesta es Colombia.
Traditional Vallenato music of the Greater Magdalena region
Inscribed in 2015 (10.COM) on the List of Intangible Cultural
Heritage in
Need of Urgent Safeguarding
Heritage in
Need of Urgent Safeguarding
Traditional Vallenato music fuses cultural expressions from northern
Colombia, the songs
of cow-herders of the Greater Magdalena region and the chants of African slaves with the traditional dance rhythms
of the indigenous people of the Sierra Nevada de Santa Marta. These expressions are also blended with Spanish poetry
and music al instruments of European derivation. The lyrics of traditional Vallenato music interpret the world through
stories that mix realism and fantasy, expressed through songs that are nostalgic, joyful, sarcastic and humorous.
Traditional instruments include a small drum played with the hands, a wooden ribbed stick played with a wire comb,
and an accordion. Traditional Vallenato music falls into four main rhythms or beats known as airs, each of which has a
distinctive rhythmic pattern.
Traditional Vallenato music is performed at Vallenato music festivals and crucially at ''parrandas'' where friends and
family gather, thus playing a crucial role in building a regional shared identity. It is also transmitted by teaching in
formal academic settings. The element faces a number of risks to its viability, however, notably the armed conflict in
Colombia fuelled by drug trafficking. In addition, a new wave of Vallenato is marginalizing traditional Vallenato music.
and diminishing its role in social cohesion. Lastly, the use of street spaces for Vallenato ''parrandas'' is declining
removing a crucial space for intergenerational transfer of musical knowledge.
of cow-herders of the Greater Magdalena region and the chants of African slaves with the traditional dance rhythms
of the indigenous people of the Sierra Nevada de Santa Marta. These expressions are also blended with Spanish poetry
and music al instruments of European derivation. The lyrics of traditional Vallenato music interpret the world through
stories that mix realism and fantasy, expressed through songs that are nostalgic, joyful, sarcastic and humorous.
Traditional instruments include a small drum played with the hands, a wooden ribbed stick played with a wire comb,
and an accordion. Traditional Vallenato music falls into four main rhythms or beats known as airs, each of which has a
distinctive rhythmic pattern.
Traditional Vallenato music is performed at Vallenato music festivals and crucially at ''parrandas'' where friends and
family gather, thus playing a crucial role in building a regional shared identity. It is also transmitted by teaching in
formal academic settings. The element faces a number of risks to its viability, however, notably the armed conflict in
Colombia fuelled by drug trafficking. In addition, a new wave of Vallenato is marginalizing traditional Vallenato music.
and diminishing its role in social cohesion. Lastly, the use of street spaces for Vallenato ''parrandas'' is declining
removing a crucial space for intergenerational transfer of musical knowledge.